Por: Mariel Granados
La Asociación Cámara de Desarrolladores de Turismo Rural Comunitario Chirripó (CATURCOCHI), creó el proyecto «Cultivos de esperanza», que ha logrado beneficiar a más de 40 familias.
La iniciativa tiene como objetivo aprovechar los patios de cada familia generaleña y convertirlos en huertas para que así generen sus propios alimentos.
Un 90% de la población en este sector se dedica al turismo y la pandemia ha provocado que sus ingresos ahora sean limitados, así que mientras se reactiva nuevamente el turismo, le surgió esta idea al vocal de la Asociación, Edwin Elizondo.
Según Elizondo, «la mayoría de personas tienen un pedacito de tierra para poder cultivar, pensamos que sería bueno sembrar nuestros propios alimentos, esto es un apoyo mientras el turismo se reactiva paulatinamente, tal vez sea una solución parcial, pero mitiga un poco lo que está pasando».
Esta iniciativa se empezó a implementar hace dos meses atrás, los beneficiados son de las zonas de Rivas, Chimirol, Canaán, San Gerardo y Herradura de Pérez Zeledón.
A cada miembro de la Cámara se le entregó los materiales para sembrar como almácigos de lechuga, remolachas, repollo, brócoli, albahaca, kale, tomate cherry, cebolla. Además semillas como culantro, pepino, frijol, maíz, rábano, zucchini y vainica.
El gerente general del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), Alberto López, aplaudió y destacó esta iniciativa entre el sector público y privado.
La idea es que tengan semilla para bastantes meses y de paso que ahorren produciendo sus propios alimentos. La meta de la Cámara es brindarle diarios a más de 60 familias.
