Misa del 1° de mayo en Catedral Metropolitana destacó el trabajo digno y la corresponsabilidad social
Este jueves 1º de mayo, en el marco del Día del Trabajador y la festividad de San José Obrero, se celebró la misa especial en la Catedral Metropolitana de San José, presidida por el monseñor Daniel Francisco Blanco, obispo auxiliar de San José.
La ceremonia religiosa inició a las 8:00 a.m. con la asistencia de diversas autoridades y representantes sociales, entre ellos el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Andrés Romero; el director de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Costa Rica, Eliel Hasson Nisis; y el presidente de la Confederación Nacional de Asociaciones de Desarrollo (Conadeco), Daniel Quesada Mora, además de delegados de organizaciones sociales y laborales.
Durante su homilía, monseñor Blanco hizo un llamado a la acción conjunta entre autoridades gubernamentales, gobiernos locales y empleadores, en beneficio del sector trabajador.
“El trabajo no es más que la continuación del trabajo de Dios en la tierra”, expresó el obispo auxiliar, al tiempo que subrayó la necesidad de generar empleos que ayuden a erradicar el crimen organizado, respetando siempre condiciones laborales justas y la dignidad humana.
También recordó las palabras del papa Francisco, al instar a no olvidar a los migrantes que buscan mejores oportunidades y que, con su esfuerzo, impulsan los sectores laborales y productivos del país.
