Un total de 34 cohetes fueron lanzados este Jueves Santos desde Líbano con destino a Israel, lo que supone el ataque de mayor envergadura desde 2006, cuando ambas naciones libraron una guerra.
Del total de proyectiles, cinco cohetes aterrizaron en suelo israelí y los demás fueron interceptados por el sistema antimisiles Cúpula de Hierro, según informaron medios internacionales.
El ataque causó al menos un herido por metralla en el norte de ese país, donde sonaron las alarmas en varias localidades de la zona.
El servicio de emergencias médicas israelí informó que un joven de 19 años sufrió una herida en la mano por el impacto de metralla, mientras una mujer de unos 60 años resultó herida en una pierna tras sufrir una caída de camino al refugio antiaéreo
Esta escalada de violencia se produce después de dos noches consecutivas de cargas policiales por parte de Israel dentro de la sagrada Mezquita de Al Aqsa contra fieles musulmanes, que se saldaron con más de 30 palestinos heridos y unos 350 detenidos.
