Un total de 9.111 cilindros de gas que no cumplían con las normas de calidad y seguridad fueron destruidos por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) durante el año pasado. Esto representa unos 3.039 más que en el 2017, con lo cual se busca reducir algún riesgo para los usuarios.
En total la Aresep realizó 513 inspecciones para verificar la calidad de los cilindros de gas. De estas un 47% se efectuó a comercializadores, es decir pulperías y supermercados, entre otros negocios; el 43% a plantas envasadoras y el 10% restante a distribuidores.
Las inspecciones tuvieron énfasis en zonas fuera del Gran Área Metropolitana, el 57% se realizó en diversas regiones del país, principalmente en Limón, Guanacaste, la Zona Norte, Puntarenas y la Zona Sur.
El programa evalúa que los cilindros tengan información, es decir, el número de serie que permite dar seguimiento a su vida útil, el peso vacío (tara) y fugas.
