Siga estos consejos para reciclar los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos que descartó en la temporada navideña
Con la época de Navidad se acostumbra a reemplazar algunos aparatos eléctricos o electrónicos, debido a que se adquieren o se reciben otros como regalo.
Por esta razón es necesario conocer cómo se deben disponer adecuadamente esos residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) que ya no se van a utilizar más, para evitar que se conviertan en un contaminante del ambiente.
De acuerdo con las cifras del Monitor Mundial de Residuos Electrónicos 2020, en el mundo se producen 50 millones de toneladas anuales de estos residuos, miles de millones de dólares en recursos de valor estratégico desperdiciados y desechados.
Asimismo, las cifras del Monitor Mundial de Residuos Electrónicos 2024, muestran que en 2022 se produjo un récord de 62 millones de toneladas métricas de desechos electrónicos, un 82% más que en 2010 y la cifra va camino de aumentar otro 32%, hasta 82 millones de toneladas, en 2030.
Debido a esto lo mejor es seguir los siguientes consejos:
- No tire los residuos a la calle ya que quienes recogen estos residuos no les dan el tratamiento adecuado.
- Lleve sus residuos a centros de acopio especializados en este tipo de reciclaje, para asegurarse de que se les dé un tratamiento correcto.
- Reutilizar y reparar: Una opción puede ser dárselo a otra persona si el artículo aún funciona de manera correcta y darles una segunda oportunidad.
- No los destruya, puede ser nocivo para la salud, ya que estos artículos poseen algunos elementos que pueden ser tóxicos si se derraman.
- Si se va a deshacer de celulares, computadoras o algún artefacto donde tenga datos privados, es mejor que antes de hacerlo se asegure de borrar todos estos datos y cuentas que puedan estar en el dispositivo, esto como un protocolo de seguridad para evitar comprometer sus datos personales.
A la fecha, solo el 1% de la demanda de tierras raras se satisface mediante el reciclaje de desechos electrónicos, ya que al estar fabricados con alta tecnología, estos residuos contienen sustancias que pueden ser tóxicas y contaminar el suelo, el agua y los alimentos, lo que repercute tanto en el medio ambiente como en la salud humana.