La pobreza en Brasil alcanzó sus niveles más altos, desde el 2012, según lo reveló este miércoles el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
El IBGE reveló que se trata de un 6,5% de la población, lo que equivale a casi 14 millones de personas, que tienen ingresos menores a 1,9 dólares por día.
Además, el porcentaje de brasileños en situación de extrema pobreza creció con relación a 2017, cuando era al 6,4% de la población del país, estimada en unos 200 millones de personas.
Brasil redujo los índices de extrema pobreza hasta situarlos en el 4,5% en 2013, pero a partir de 2014 empezaron a crecer debido a la severa crisis económica que desplomó el Producto Interno Bruto (PIB) siete puntos porcentuales entre 2015 y 2016 y cuyos efectos aún golpean el país.
El responsable del estudio, André Simoes, destacó la necesidad de impulsar políticas públicas para combatir la extrema pobreza, que afecta a los más vulnerables y a aquellos con menos condiciones de ingresar en el mercado de trabajo.
La pobreza golpea sobre todo a la población negra o mestiza, que representa casi un 73% de los pobres de Brasil.
