La Organización de las Naciones Unidas (ONU) denunció al menos 63 detenciones arbitrarias ocurridas en Nicaragua durante mayo por el gobierno de Daniel Ortega, de las cuales 55 sucedieron en una sola noche.
La portavoz del organismo, Marta Hurtado, indicó que el gobierno nicaragüense utiliza el Poder Judicial para perseguir y silenciar a sus críticos mediante acusaciones por los supuestos delitos de «conspiración para socavar la integridad nacional» y «difusión de noticias falsas».
Hurtado resaltó que el 3 de mayo anterior, 55 personas fueron arrestadas en una sola noche en distintos puntos del país y acusadas por esos delitos y señaló que entre ellas habían defensores de derechos humanos, opositores políticos, periodistas, trabajadores rurales y personas vinculadas a la Iglesia Católica.
Además la informante mencionó que durante sus audiencias de custodia, ninguno de los 55 acusados tenía un abogado de su elección y en su lugar fueron representados por un defensor público que se les impuso.
Nicaragua vive una grave crisis política desde hace más de cinco años, cuando la policía y fuerzas paramilitares reprimieron con violencia a una rebelión cívica que estalló en abril de 2018, lo que dejó un saldo de 355 civiles muertos, más de 2.000 heridos y al menos 100.000 exiliados, según organismos humanitarios.
