-Infobae. La situación en Australia es casi insostenible, los incendios que para esta epoca del año son recurrentes, han alcanzado niveles extremos: 24 personas han muerto, entre ellos bomberos, hay 1.588 casas destruidas, 5.500.000 hectáreas arrasadas por las llamas y 500 millones de animales muertos.
Las razones por la que las llaman han alcanzado estos niveles son varias, pues han sido alimentadas por una combinación de calor extremo, sequía prolongada y fuertes vientos.
Australia está sumida en una ola de calor con temperaturas récord desde hace tres meses. En diciembre nadie creía que los incendios podían ser tan mortales, los australianos vivieron el día más caluroso de la historia: la temperatura promedio fue de 41,9 grados centígrados. Abrumador incluso para una población acostumbrada al calor. Las noticias no son alentadoras pues en las próximas semanas las condiciones no variarán demasiado.
Pero este calor extremo fue acompañado por los fuertes vientos. Las ráfagas de hasta 96 kilómetros por hora -el pasado lunes-han sido el combustible para el fuego.
Por si fuera poco, el país atraviesa la temporada más seca de los últimos 120 años. New South Wales y Queensland son los estados más golpeados por el fenómeno. Las lluvias son casi nulas desde principio de 2017, y su vegetación está casi muerta desde entonces. Incluso, la sequía ha afectado las áreas agrícolas más productivas del país, incluidas algunas de las que ahora están en llamas.
Hasta este martes, al menos 69 focos de incendio continuaban su camino por todo el territorio, sobre todo en las zonas más afectadas.
